Cuenta la leyenda que Evelinita iba raudamente con su triciclo, por aquel entonces tenía unos 4 años o estaría por cumplir 5 añitos...Pachecito (mi hermana) que tenía 2 años para 3, venía parada atrás con sus piecitos sobre el apoya pie, y me venía agarrando la cintura.
Yo tenía la costumbre de ir desde la puerta de mi casa hasta la esquina, unos 30 metros, iba y venía, parándome en la esquina y mirando, pero regresaba otra vez a casa, porque Nicky todavía no me dejaba ir más allá de la “esquina”.
Hasta que un día, de rebelde nomás, me aventuré un poco más y doblé en 90° en esa esquina, llevándola a Pachecito de pie en mi triciclo, mi perro Cherry (si, ese al que le teníamos que hablar en inglés)
Y en la esquina...el choque o casi choque, creo que frené cuando escuché un grito. Cherry iba corriendo delante de mí así que con lo primero que te cruzaste – vos venías caminando- era con ese coso todo negro, peludo y gigante = CHERRY :)

Y ahí me preguntaste si ese perro era mío. Y yo te habré dicho que no tengas miedo porque Cherry no se comía nenas, que era un perro bueno
Y me preguntaste mi nombre, y yo te pregunté el tuyo...y la siguiente fue la pregunta que selló nuestro pacto, ya de por vida:...”¿QUERES SER MI AMIGA?!”
Aquí va una foto que encontré, hacía muy poquitos meses que estaba viviendo en Hudson, en el porche de casa está MI TRICICLO! Cherry y Pachecito!!!

Que chiquitas que éramos! me dá cosquillitas en el corazón!